domingo, 10 de marzo de 2013

NOTICIA: Fernando Casares medalla de Bronce en el Gran Prix de Budapest(Hungría)

Memorable actuación del sablista Fernando Casares en la Copa del mundo celebrada este fin de semana en Budapest (Hungría), una de las pruebas más fuertes del circuito FIE al ser uno de los epicentros de la esgrima europea.

El tirador madrileño se hizo con una medalla de bronce que vale su peso en la clasificación para el mundial absoluto de esgrima, el cual tendrá lugar en la misma ciudad del 6 al 14 de Agosto.

La competición de Fernando no se presentó como empresa fácil tras la poule; tres victorias y tres derrotas que le obligaban a disputar el tablón de 128 para verse en el segundo día de competición. Y allí se metió (tras derrotar 15-3 a un bielorruso de apellido impronunciable), en la posición 69 para disputar el tablón de 64 contra el Bronce de los JJOO de Londres, el ruso Nicolay Kovalev. Un agónico asalto, peleado hasta el final que Fernando ganaría por 15 tocados a 14 para ponerse de número 6 de la prueba y respirar un poco más tranquilo. Idéntico resultado obtendría en el tablón de 32 contra el ucraniano Dmytro Boyko. En 16 llegó la victoria contra el francés Vicent Astett por 15 a 13. Fernando ya había recogido frutos suficientes metiéndose entre los 8 mejores de la prueba, pero el "guerrero" aún quería más. Fue entonces cuando se enfrentó a la joven promesa italiana Enrico Berre', que se había colado en la fiesta de los mejores sablistas de Europa. Asalto a priori soñado para una final de 8 en Budapest, Fernando tuvo que trabajar y sudar para imponerse por 15 a 14. Ya tenía el bronce virtualmente en su cuello cuando se disponía a tirar el que sería su último asalto de la competición. En la semifinal cayó derrotado "in extremis" 15 tocados a 14 ante el tapado de la prueba, el surcoreano Kye Hwan Kim que finalmente se hizo con la plata ante el alemán Nicolas Limbach, campeón de la Copa del mundo de Budapest.

Un bronce que sabe a oro tras la gran actuación de Fernando en una prueba tan dura como la húngara. Más aún si tenemos en cuenta el momento económico del país y del deporte español que están llevando al sablista español a autofinanciarse estas competiciones para continuar forjando la mejor temporada de su carrera deportiva.

Otra vez hemos aprendido de este gran deportista que la juventud en el deporte no siempre viene impresa en un pasaporte, sino que va de la mano de la ilusión, el trabajo y el talento.

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